Pues si ya se frotaban las manos los merengues pensando que con ausencia de Messi su liderato era inminente. E incluso Ancelotti ya daba fecha para enero de dicho liderato. Pues resulta que están a CINCO del Barça y a posiblemente a CINCO de nuestro gran rival este año el Atlético si este consigue ganar en el Calderón esta noche al Valencia.
CINCO es un número fetiche para el Barça porque es un número que provoca urticaria en la piel madridista. Esos CINCO dedos levantados al cielo por Piqué ha hecho sangrar más heridas madridistas que los mordiscos de Drácula. Fue dolorosa aquella derrota para el madridismo y orgásmica para los culés. Claro que hubo dos precedentes ya lejanos en el tiempo de otros CINCOS como fueron los CINCO goles en San Siro del Milán de Sachi a la QUINTA del Buitre y el CINCO - 0 con la cola de vaca de Romario incluida que hicieron gravar a fuego ese número en la sensible piel de cada uno de los merengues.
Pues aunque no es ni mucho menos CINCO puntos un distancia decisiva si es una cifra que pone a las claras quien es el verdadero líder en España.
Y debemos de volver a recordar que tenemos lesionado a nuestra bandera. En breve Leo Messi podrá volver, Dios mediante, a los terrenos de juego. Dispuesto a ser el caballo de Átila que por donde pasaba no crecía la hierba. Y encima con un Neymar que en los últimos dos partidos a marcado CINCO goles.
La Copa del Rey el martes en donde perder por CINCO goles nos eliminaría el Cartagena y CINCO días después contra el Getafe una victoria, en un complicado partido sin Neymar ni Messi, llevarían a un final de año con gran tranquilidad a CINCO puntos.
No es cuestión de ser groseros pero sí burlones. Y ya saben CINCO, CINCO, CINCO por el ... Te la ...
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