lunes, 2 de mayo de 2016

Al loro que no estamos tan mal



¿Por qué teniendo mejor equipo que Bayern, City, Madrid y Atleti no estamos jugando las semifinales de Champions? ¿Por qué teniendo una ventaja sobre el segundo de 9 puntos y sobre el tercero de 12 puntos estamos ahora sufriendo para ganar la Liga? ¿Por qué el equipo que ganó un triplete el año pasado y este año ha batido el record de partidos sin perder ahora me da tan malas sensaciones?

Todas estas preguntas nos llegan como latigazos a las mentes de cada uno de los barcelonistas. Y no llegamos a ninguna conclusión definitiva. El temor a poder perder todo tiene a muchos culés con estrés y ansiedad, además que la temprana eliminación de Champions los ha llevado al ancestral pesimismo culé. "Perderemos todo, el Madrid ganará finalmente la Liga y encima se llevará la Champions". Y me sorprende después de vivir lo que estamos viviendo todos estos años recientes que esta actitud vuelva cada vez que se nos complican las cosas. Llevamos muchos años sabiendo que nuestros jugadores nos han llevado al éxtasis y que muy pocas veces nos han defraudado. No hay que irse muy lejos, el año pasado, volvimos a hacer un triplete que algunos equipos solo sueñan con ganarlo a principio de temporada.

¿Por qué creo que hemos llegado a esta situación? Dos motivos principalmente el primero ha sido la pésima planificación de la plantilla que ha llevado a que en el momento clave no tuviéramos suficientes recambios para que los que llegaran por detrás fueran revulsivo. No haber fichado un delantero más de categoría contrastada como solicitó Luis Enrique, tipo Nolito, o cualquier otro es una muestra de la dejadez de la directiva en este campo. A veces hay que cambiar para quedarte donde estás y eso no lo ha comprendido esta directiva y se ha escudado en una regla económica de los estatutos para no hacer bien su trabajo. Y segundo motivo es que el fútbol es tan maravilloso y caprichoso que todo puede cambiar en un segundo o en un partido. Aquella derrota contra el Real Madrid que parecía una derrota sin importancia unida a la derrota en Anoeta llevó al equipo a dudar sobre si mismo. Y el caprichoso fútbol hizo el resto para llevarnos a esta situación.

Pero como dice el título del articulo, tengamos claro que no estamos tan mal. Estamos a tres partidos de ganar dos títulos. Hacer un doblete que haría que este año fuera un gran año para nosotros. Las expectativas eran altas y por eso  ahora nos sentimos algo frustrados, sobre todo los jugadores que había puesto su objetivo principal renovar titulo de Champions siendo el primer equipo de la historia en hacerlo. Al verse fuera de ese objetivo nos sentimos como si fuera poco lo que nos queda pero no es así. Es mucho ser campeones de Liga y Copa por eso lo mejor no es dudar, lo mejor es creer y  luchar con fuerza por el objetivo. Y si ganamos esos tres partidos seremos felices y lo que hagan los demás no nos importa nada. Los tiempos en los que nos fijábamos en lo que hacían los otros equipos han pasado. Si son campeones de Europa o no ya para nosotros no debe tener mayor trascendencia. Que nos gustaría que no lo fueran, esta claro no, clarísimo pero que eso sea algo que varíe nuestra opinión sobre nuestro Barça para nada debe ocurrir. El año que viene deberemos corregir errores y no dar oportunidades a nuestros rivales para levantarse. A mi me preocupa el Barça y solo el Barça centrarse en nosotros y ganar nuestros campeonatos. A final de temporada haremos balances y veremos que: "Al loro, que no estamos tan mal..." 

2 comentarios:

  1. La linea que separa el exito y el fracaso es tan fina....

    Buen articulo, amigo

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  2. Gracias Antonio, os recomiendo seguir a Confiesa en su blog:
    http://unblogmuycule.blogspot.com.es

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